En los jardines pequeños, cada vez más frecuentes dada la proliferación de viviendas unifamiliares adosadas, es necesario pensar con cuidado cómo distribuir espacios, qué ejemplares se van a emplear y los elementos que se van a incluir.
Sin prisas
El primer consejo es no tener prisas. Observe durante varios días su jardín. Anote las horas de sol directo que recibe, si está mayoritariamente expuesto a las inclemencias o casi por completo protegido del viento, si cuenta con zonas muy sombrías... Así podrá elegir ejemplares idóneos que se adapten y medren sin demasiados problemas. Dibuje más o menos lo que querría conseguir teniendo en cuenta el uso que va a hacer del jardín. Hay quien precisa de un rincón tranquilo de lectura y quien prefiere una zona de juegos infantiles. Y no pretenda tenerlo listo con una única visita al vivero y en apenas un fin de semana de trabajo.
Elementos verdes
-Árboles y setos son lo primero que conviene instalar. Seleccione ejemplares de crecimiento moderado, a menos que le sobre el tiempo para estar podando árboles y arbustos que continuamente se están desmadrando. Muchos árboles tienen un tamaño reducido y muy adecuado para estos jardines, como ciruelos, magnolios, moreras o tejos.
-Para dar impresión de mayor amplitud apueste por las formas irregulares en macizos, evitando los setos cuadrados, densos y muy podados. Procure crear distintos niveles, con plantas de distintos tamaños y formas, para engañar al vista y que el jardín parezca más grande de lo que es.
-Si quiere incluir plantas trepadoras en alguna pared, no elija aquellas que ensanchen mucho para evitar que roben espacio al jardín.
-Reserve cierto espacio para plantas aromáticas. Además de contribuir a tener un jardín fragante, algunos ejemplares pueden resultar muy útiles en la cocina.
-En cuanto a las plantas de flor, conviene situar las especies con colores más apagados al fondo y aquellas con colores vivos en primer plano. No obstante, en los jardines pequeños es preferible que predominen los tonos suaves.
-Escoja plantas que aguanten espléndidas al menos dos estaciones. De poco valdrá un ejemplar magnífico tres semanas y vulgar el resto del año. En un jardín pequeño no podrá camuflarlo hasta que vuelva a florecer.
Otros elementos
-Instale únicamente los caminos esenciales. Combinar madera y piedra (grava con cortezas a los lados por ejemplo) está muy de moda. Si hay realmente muy poco espacio no conviene siquiera poner un solo sendero.
-Si hay suficiente espacio no olvide poner un punto de agua. Conviene que se escuche el relajante sonido del agua, pero en los jardines pequeños es aconsejable apostar por fuentes discretas.
-Si se atreve, juegue con algunos espejos. Pueden dar resultados magníficos en espacios pequeños.
-No recargue con elementos ornamentales los jardines pequeños, un solo y buen detalle basta.