5.25.2005

El cuidado de los bonsáis

Los bonsáis, como las orquídeas, son con frecuencia objeto de regalo que acaban muriendo más pronto que tarde. Por eso, tanto unos como otras tienen merecida fama de delicados. De los cuidados de las elegantes orquídeas ya hablaremos la próxima semana. Hoy toca conocer unas cuantos conceptos básicos para lograr que estos árboles miniaturizados, de origen japonés, sobrevivan.
- Lo primero que hay que tener en cuenta, es que no son una planta que se pueda ignorar durante días. Algo aplicable también a las orquídeas. Requieren una atención constante para saber a tiempo si algo va mal.
- Muchos bonsáis mueren por la falta de riego. Al venir en macetas tan pequeñas con muy poca cantidad de tierra, se seca con frecuencia y necesita agua continuamente. En verano incluso varias veces al día. En la mayoría de los ejemplares es aconsejable el riego por inmersión (sumergir un par de minutos la maceta entera en agua).
- Salvo en algunos casos concretos, como el olivo, hay que regar sin esperar a que el sustrato deje de estar húmedo. Pero jamás debe dejarse agua en la bandeja inferior, o se pudrirán las raíces.
- Es también muy importante pulverizar a menudo el tronco y las hojas. Pero que nadie crea que con la pulverización está regando a la planta.
- Hay que tener muy en cuenta si el ejemplar es de interior o exterior. En cualquier caso, salvo algunas excepciones, suelen necesitar mucha luz, sin sol directo y las heladas, la calefacción y las corrientes de aire son mortales de necesidad.
- Cada dos o tres años necesitará un transplante y una poda de las raíces. Si no es muy ducho, lo más aconsejable es que acuda a algún centro especializado para que lo efectúen ellos.

5.20.2005

Al rescate

Muchas plantas se han visto obligadas a sobrevivir por su cuenta, o con pocos cuidados, durante prolongados periodos de tiempos estas vacaciones. En muchos casos el retorno al hogar supone un desalentador recuento de bajas. Pero no siempre hay que tirar la toalla.
- Para las plantas que muestren claramente síntomas de sequía la reanimación consiste en extraer el cepellón e introducirlo en un cubo con agua hasta que dejen de salir burbujitas, para después volver a introducirlo en la maceta. En algunos casos el resultado es casi milagroso.
- Si una mano inexperta las ha regado en exceso, la solución pasa por extraer el cepellón, envolverlo en papel de periódico cuantas veces sea necesario hasta extraer todo el exceso de agua posible y luego dejar la planta en reposo durante varios días.
- No olvide retirar lo antes posible las hojas y flores muertas, limpiar el polvo que pueda haber sobre las hojas y olvide el abono hasta que sus ejemplares recobren energías y gocen de cierta salud. Gire aquellas plantas que hayan crecido en dirección al sol durante todos los días de ausencia para evitar deformaciones. En climas secos, una buena dosis de pulverización de agua sobre las hojas es también aconsejable.
- Por último, cuanto antes reponga los ejemplares perdidos por nuevas y hermosas plantas, antes olvidará el disgusto.

5.15.2005

Cómo secar flores frescas con la técnica del prensado

Las flores secas son altamente decorativas. Ahora que merced a la primavera abundan las flores frescas, es un buen momento para llevar a cabo el secado de los mejores ejemplares.
— El método más sencillo es el del prensado.
— Para prensar flores hay que colocarlas sobre sucesivas capas de cartón (preferiblemente ondulado) revestidas de papel de periódico o de estraza.
— Después hay que colocarlas en un lugar ventilado y bajo una tabla que soporte peso (libros, piedras...).
— El proceso de secado suele durar un par de semanas.

5.10.2005

La hortensia

La hortensia es un arbusto de flores muy peculiar, que en determinadas circunstancias resulta facilísimo conservarla en plenitud y en otra son hay manera de sacarla adelante. En la zona norte de España es común verlo como arbusto de jardín, con enormes y hermosos racimos de flores en las distintas tonalidades del rosa y el azul, pero en el resto de la península se suele vender como planta de maceta.

Cuatro reglas de oro.—Para lograr flores rosas, el sustrato debe sercalizo. Para que sean azules, tendrá que se ácido.
—Son muy exigentes con los riegos. En cuanto amarilleen hay que regar en abundancia. Gustan de humedad ambiental, y buena ventilación.
—La calefacción, las heladas, el frío seco y el calor seco son sus enemigos mortales.
—Si se encuentra en el interior o en el exterior pero resguardada, en cuanto finalice la floración es muy importante acometer una poda cortando las ramas a unos 40 centímetros como mucho.
—En lugares muy fríos es mejor dejarla como protección ante las heladas y podar una vez haya pasado el invierno dejando un par de hojas sobre los tallos tiernos.

5.05.2005

Abono, ni mucho ni poco

Con el inicio de la primavera conviene abonar nuestras plantas, para que tengan suficientes nutrientes con los que afrontar la floración y el crecimiento propios de estas fechas. Pero es muy habitual excederse o quedarse corto con la cantidad de abono. Si ha abonado demasiado, percibirá un crecimiento desgarbado y verá como se queman (se tornan marrones) las hojas. Para solventarlo riegue bien la planta permitiendo que el agua sobrante se escurra por los agujeros de drenaje del tiesto. Si en cambio se ha quedado corto comprobará como el crecimiento de la planta es escaso, al tiempo que amarillea e incluso se va secando. Para compensarla, emplee un abono líquido en el sustrato. Si las hojas están dañadas, emplee un abono foliar. En cualquier caso, siempre es preferible quedarse corto. Por último, hay múltiples tipos de abonos y fertilizantes, no todos son aptos para todas las plantas o en todo momento. Déjese asesorar en su vivero o tienda de confianza.